jueves, 14 de enero de 2016

Un comentario sobre la película "Sufragistas"



”Sufragistas” es una película inglesa que nos lleva a unos momentos en los que las mujeres no tenían ningún derecho: principios del siglo XX, antes de que comience la I Guerra Mundial. Es más yo diría que en muchos casos, eran tratadas casi como esclavas y utilizadas, sobre todo, como mano de obra barata y objetos sexuales. 

En un momento determinado, en Inglaterra y promovido por Emmeline Pankhurst, que era la esposa de un abogado de clase alta, surge un movimiento que pretende rebelarse contra esa “esclavitud” y prepotencia del hombre que se cree superior. Principalmente sus bases la formaban multitud de mujeres de clase obrera. 

La película nos cuenta cómo una mujer “común” va entrando en un proceso de concienciación ideológica y política, arriesgando su hijo, su matrimonio y hasta su vida, hasta las últimas consecuencias.

Las personas que tenemos una cierta edad y, aunque hayamos tenido derecho al voto (en España desde 1931, gracias a la Segunda República), no hemos podido ejercerlo durante muchos años, además de otras libertades de las que carecíamos con respecto a los hombres, sólo podemos sentir admiración y agradecimiento hacia la lucha de esas mujeres hasta conseguir la victoria. Y un poco de vergüenza.

Las imágenes de Londres, donde se desarrolla casi toda la película, están muy bien logradas, con una especie de niebla continua y tonos neutros que consigue transmitir una gran emoción, así como las escenas del trabajo cotidiano en la lavandería.

La interpretación de todos los actores es muy buena, pero para mí Carey Mulligan “borda” el papel de Maud Watts. Esto hace absolutamente creible la historia de la película que, aunque está basada en hechos y personajes reales, tiene su parte de ficción.

Al final del film van apareciendo las fechas en las que los países han ido logrando el voto femenino y algunos de ellos llaman poderosamente la atención: Francia, 1944; Italia, 1946; Mónaco, 1962; Suiza, 1971. El Reino Unido lo consiguió en 1928.

Película absolutamente recomendable. Es necesario recordar la historia de vez en cuando. 

Nuntxi Pérez

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